CAPITULO 5: Ciudad oscura

Ciudad Oscura


La Peste
La Peste Negra muestra su poder dejándose ver de vez en cuando y tímidamente comienzan a morir personas infectadas. Cadáveres infectados de Peste tirados por los barrios más desfavorecidos y un carro de muerte va amontonándolos para quemarlos fuera de la ciudad.

Hay zonas de la ciudad cerradas y custodiadas por guardias, los que intentan salir de ellos mueren a espada, son las zonas más infectas y los pudientes no dejan que la enfermedad salga de estos núcleos.

Hay puertas de domicilios marcadas con una gran X negra y nadie sale ni entra de ellas. Cazar algo sano está más difícil que nunca. Los hospitales de la ciudad están a rebosar y mueren cuidadores y enfermeras por doquier que también son arrojados a la pira purificadora del fuego.

Hay rumores de que Dios se ha cansado de la raza humana y ha enviado al jinete del apocalipsis llamado Peste para que castigue al hombre. Hay poco movimiento por la ciudad y ya ha muerto un tercio de la población de Jerusalén. A pesar de todo, la vida sigue abriéndose camino.


El Sueño
Albert, el Salubri sueña con un monje que recita una letanía una y otra vez:
“…tras la tregua de la tercera Guerra Santa vendrá  la muerte del Rey León del oeste y después la del Rey del Desierto del Este. Sucederá en la tierra Sagrada de Shalem renacerá el Rey de los Demonios del viento viejo enemigo del Ángel de la Muerte…”

Albert gracias a su ocultismo y su academicismo interpreta su sueño de la siguiente forma:

Tras la tercera cruzada, la muerte de Ricardo Corazón de León.
Ocurrirá en Jerusalén.
Renacerá Pazuzu el Rey de los Demonios del Viento Sumerio de la vieja Mesopotamia. cuna de la civilización.
Azrael, es el Ángel de la Muerte.


El contacto de Edward
Tom "el ingles"
Edward una noche de caza, en una taberna infecta, se encuentra con un marino que va con los suyos a la taberna, vienen del puerto de Tel-Aviv, Tom es el contacto de Edward en la ciudad de Acre

“¿Navegante? ¿Eres tú? conocido en todo el mar mediterráneo, en puertos y barcos de dudosa reputación. Piratas, marinos, bucaneros, comerciantes y nobles saben quién es el Navegante ya que su buena reputación habla por él.

Soy Tom, el inglés, estuve contigo en el Corazón Negro, luche a tu lado contra esos morenos cabrones en el estrecho de Gibraltar. Nos las hicieron pasar putas cuando incendiaron aquel barril de pólvora y el Capitán voló por los aires. Tomaste el mando y les abordamos con el fuego de nuestro barco y les robamos su barco después de pasarlos a  todos por la piedra. Tuvimos la cabeza de su capitán en el palo mayor hasta que se pudrió… Joder el Navegante, pensaba que estabas muerto.

Ven te invitamos a todo lo que puedas beber esta noche.¿Qué haces tú en Jerusalén? Es el último lugar donde te imaginaba, siempre nos habíamos encontrado en Acre. Nosotros hemos traído un cargamento de trigo desde Tiro y lo hemos transportado hasta Tel-Aviv y pasamos unos días aquí.

Edward se emborracha con ellos, alimentándose de sangre embriagada de alcohol y disfruta de una buena juerga que casi le cuesta la no-vida. Intenta cazar borracho y un sacerdote con Fé le da un buen susto teniendo que huir de él hacia su refugio sin mirar atrás.

Dragomir de Mulbach, Pj Tzimisce
El encuentro
Yrian desde lo alto del tejado del dominio de la cuadrilla ve un extraño acercarse. El Gangrel defendiendo su territorio saca sus cuchillos y pone sus ojos rojos. Obliga a identificarse al extranjero y este le cuenta que viene de una lejana tierra y que busca vampiros como él para presentarse a ellos, asunto que poco le importa al Gangrel. Yrian le deja esperando en la entrada del refugio de la cuadrilla y tras consultar a Ales le hace pasar.

Dragomir es un neonato Tzimisce un tanto perdido por las calles de Jerusalén. No conoce a ningún otro vampiro y el azar le ha traído a Jerusalén, le gustaría aportar su espada a la causa por un refugio comunal, entiende que su supervivencia pasa por vivir en grupo y prueba suerte. Ales el Ventrue, le acepta y pone a su disposición el refugio de la cuadrilla a cambio de sus servicios de soldados.

Azrael
Cuando Albert el Salubri comparte con su cuadrilla su sueño, entre todos unen sus conocimientos ocultistas y académicos sobre ese nombre y consiguen saber:

Azrael es uno de los nombres que recibe el ángel de la muerte entre los judíos y musulmanes. Tiene por misión recibir las almas de los muertos y conducirlas para ser juzgadas. Su nombre deriva del árabe Izrail (que significa "Aquél a quien Dios ayuda"), en el islam contrario a lo que piensan muchos no aparece este nombre en ninguna parte del  Corán pero si aparece la figura del ángel de la muerte.

Azrael fue conocido inicialmente como Azra, el descendiente de los grandes sacerdotes de  Aarón y escriba en el periodo del segundo Templo de Jerusalén. Recibió el nombre de Esdrás, el profeta que vaticinó la llegada de Cristo. Azrael subió al paraíso sin haber probado la muerte. Aparece asimismo en los escritos del hereje cristiano Marción, donde es mencionado como el ángel de la Ley.

Generalmente se le describe como un arcángel bajo las órdenes de Dios, defensor de un concepto de la Muerte menos lúgubre que el habitual en sus personificaciones más conocidas. Dependiendo del punto de vista de las diferentes religiones en las que aparece Azrael, éste reside en diferentes lugares, pero el más habitual es el tercer cielo.
Otras versiones defenderían que renunció al cielo con un coro de ángeles a su cargo para rescatar las almas mandadas al Infierno, estando por tanto localizada su residencia en el último círculo del mismo, donde podría también procurar que los demonios se mantuvieran en su lugar.

En su rango de ángel, Azrael tendría como misión de tranquilizar a las almas en estado de transición y en esta tarea se erigiría, propiamente, como Ángel de la Muerte. Aunque algunos teólogos lo colocan como una Potestad dentro de la jerarquía angelical mientras que en el judaísmo es considerado el líder del coro de las potestades


Los demonios de la noche
Sacerdotisa de Lamashtu
Una noche, cerca de su refugio, en los sótanos, suena un extraño cántico y un lloro de bebe que les llama la atención, suena intermitentemente y con tonos variables.
Los túneles del submundo les llevan a niveles por debajo de Jerusalén.
No debían haber escuchado esto desde tan lejos, algo les trajo el sonido.
Cada vez oyen el lloro más fuerte y los cánticos en un idioma olvidado, que los personajes identifican con el Sumerio de Mesopotamia, cada vez estos cánticos son más fuertes.

Atraviesan un laberinto de túneles olvidados y medio derruidos les lleva a un templo
 subterráneo donde están haciendo un sacrificio ritual. Un grupo de 7 encapuchados se reúnen a la luz de 5 velas negras dibujando un gran pentagrama en el suelo y en el centro de estos encapuchados un altar de piedra con un bebe desnudo llorando encima.

Una Sacerdotisa recita frases en lengua antigua y con una especie de Gran daga ritual la hunde en bebe y da de su sangre a beber a los encapuchados. Susurra el nombre de Lamashtu en Sumerio: DIMME

Los personajes cargan contra el culto satánico mientras la Sacerdotisa intenta invocar a un Demonio de su Madre Dimme.

Demonio menor
Y de los restos del bebe se forma un demonio de pequeño tamaño que ataca a los personajes. Yrian se enfrenta a el demonio a garrazos y lo mata quedando herido de muerte por el engendro infernal.
  
La Sacerdotisa los maldice antes de morir:
“Que mi Diosa Madre Dimme os castigue a todos. Oh Dimme, Lamashtu, Labartu”

El lugar de la misa satánica arde en llamas purificadoras y al llegar al altar explota como si hubiera llegado a algo especialmente combustible. El lugar queda sepultado bajo las rocas de la Jerusalén subterránea.

Una vez vuelven a reunirse los personajes, con sus conocimientos e investigación esta es la información que saben de Lamashtu.


Lamashtu
Lamashtu (Lamaštu) o Labartu (nombres acadios), llamada también Dimme (en la mitología sumeria) era un demonio femenino en la mitología de los pueblos mesopotámicos. Era un demonio sumamente maligno, y por tanto muy temido.

Se alimentaba de niños lactantes, a los que raptaba mientras dormían sus madres para comerse su carne y beberse su sangre. También era responsable de los abortos, que provocaba tocando siete veces el vientre de la madre gestante, y de la muerte de los niños en la cuna. También eran sus potenciales víctimas las madres y, ocasionalmente, hombres adultos a los que devoraba.

Era hija del dios An, y muy poderosa también por derecho propio. El único ser capaz de actuar contra ella era Pazuzu, su consorte. Por ello, para evitar su ataque, en los niños recién nacidos y en sus madres se colocaban amuletos con la imagen de Pazuzu.

Se le representaba con cuerpo peludo, cabeza de leona (a veces de pájaro) con orejas y dientes de burro, largos dedos con uñas también largas, y patas de pájaro con garras afiladas.

A menudo se muestra montando un burro y amamantando un perro con el pecho derecho y un cerdo (a veces, otro perro) con el izquierdo, mientras sostiene serpientes (bicéfalas a veces) en ambas manos.


El favor del antiguo
Un joven monje se acerca a los personajes, viene de parte del antiguo Lasombra el Padre Paliuro de Jerusalén.

El antiguo Lasombra les convoca enfrente de  la iglesia del santo sepulcro.

Están en una pequeña villa desde la que se ven los acantilados y las colinas escarpadas a diferentes alturas de Jerusalén.

La casa es sencilla, y el sótano está acomodado para que un grupo de personas se sientan a gusto, velas, incienso, sillas cómodas, imágenes de ángeles luchado contra demonios y una estatua de Jesucristo y el sagrado corazón de Jesús a tamaño real, es muy realista y esta esculpida con mucho gusto.

Cuando el antiguo Padre Paliuro Rustucci ve a Innisaq:

“Sucio Caitiff, no quiero que vuelvas a manchar mis Dominios, sal de aquí o sufrirás la ira de Dios. No eres aceptado en mis dominios, aunque te haya permitido vivir y habitar en Jerusalén no quiere decir que tengas que enseñarme tu pútrida cara. Debes sufrir  el estigma social porque Dios así lo ha querido. Yo tengo el derecho de denigrarte si me place.  ¡¡¡¡ Fuera Infame Caitiff !!!!”

Innisaq, se va y espera a sus compañeros a un par de manzanas del lugar.

El airado Padre Paliuro continua,

“Ales Ambrox Arista, chiquillo del Gran Cristian Augusto de Luxemburgo, antiguo respetado por su poder. Es para mí un placer acoger en mi casa a un chiquillo de tu Sire, mi casa es tu casa.

Dios conduce mi vara y mi cayado. Todo lo que hago es en su bien y beneficio.
Espero que vuestra relación con nuestro Dios Padre sea buena.”

Sonríe a los claramente creyentes y ante  los claramente ateos, se santigua y dice mirando al techo “Padre perdónalos porque no saben lo que hacen”

“Habéis sido convocados hoy aquí por el más devoto súbdito de nuestro Señor Jesucristo y a él será a quien sirváis a través de mi, un mero mensajero de su palabra”

Saca una carta con un sello de la Iglesia Católica Romana y se lo ofrece al más apto de los pjs para liderar la empresa.

Iñigo coge la carta y rompe el sello disponiéndose a leerla…

“NOOOOOOOOOOO, ¡¡¡ incauto !!!  NO ES PARA TI …”

Iñigo se queda petrificado con la carta abierta.

Un criado se lleva la carta y vuelve  atraerla sellada. El Padre Paliuro Rustucci reza en silencio, se santigua y prosigue:

Como os decía soy un hombre ocupado y mi tiempo es de vital importancia para asuntos más importantes que los que aquí acontecen.
Sin embargo vosotros meros neonatos debéis ganaros vuestro lugar en nuestra comunidad. Y eso requiere de esfuerzo, sacrificio y dedicación.”

(Se queda 30 segundos parado mirando al techo)

Da la sensación de que está un tanto desequilibrado, pero él no le da importancia y prosigue:

“Debéis entregar este mensaje en mi nombre a alguien… peculiar”
Su cara de Paliuro se desencaja de furia.

Es un ser de la peor calaña que está corrompido por el maligno sin duda, sacrílego y pagano flirtea con fuerzas del averno y su alma esta corrupta y condenada.
Hay una peculiaridad y es que es un hermano de clan. Es un Lasombra.
Así que nuestros caminos no deben cruzarse por el bien de nuestra comunidad.

Viajar es peligroso y no estoy dispuesto a correr ese peligro.”

(Se queda 30 segundos parado mirando al techo y asiente repetidamente)

“Vosotros lo haréis por mí.”

Dada la importancia del mensaje no puedo enviar a un mensajero humano o sirviente ghoul. El mensaje es para Lesmes Sinester.

Si no jugáis bien vuestras cartas puede que no regreséis de su Ciudad Oscura.
Si lo hacéis me habréis demostrado que sois dignos de la palabra del Señor y sabré porque Dios Padre Todo Poderoso os ha puesto en mi camino.

Recordad que no fue yo quien irrumpí en vuestra casa, ni tampoco fui yo quien molesto continuamente con unos y otros asuntos relacionados con los Tremere y cierto Inquisidor.”

(SE ENFURECE)

“Ni tampoco fui yo quien nos puso a todos en peligro por su insensatez.
Todo tiene un precio, y mi sabia palabra y consejo o influencia no es gratis.
Si todo esto no os convence, ya que me considerasteis vuestro antiguo al presentaros a mí, a pesar de mi insistencia de comunicaros que no soy el Príncipe de Jerusalén, ya que Jerusalén tiene muchos vampiros pero no tiene un señor Príncipe que los domine a todos, hace años si que lo fui pero aun no ha llegado mi hora… AUN …La segunda tradición de Caín es el Dominio, y es a la que apelo hoy aquí, ante vosotros neonatos.”
(se pone altivo y henchido)

“Algunos vampiros creen que fue el mismo Caín quien creó las Tradiciones al Abrazar a sus chiquillos, otros, en cambio opinan que los Antediluvianos las desarrollaron para mantener controlados a sus chiquillos, o que eran simplemente un conjunto de ideas de sentido común mantenidas a lo largo de los milenios porque funcionaba. Estas leyes fundamentales entre los vampiros. Es menester vuestro ser consciente de las tradiciones para no ser aborrecido en cortes o ser declarado proscrito.

Os la recordaré Neonatos, no vaya a ser que se os pase por la cabeza romper alguna de ellas. Segunda tradición El Dominio: todo vampiro a de rendir pleitesía al señor de un territorio para que este le conceda su hospitalidad y le de cobijo bajo su ley. ¿Tenéis algo que alegar? Partid y acometed vuestra empresa.”

Se queda paralizado con los ojos cerrados, sin responder a nada más y los personajes abandonan la estancia sin hacer ruido.

Los personajes aúnan conocimientos sobre ese tal Lesmes Sinester al que tienen que llevar esta carta:


¿Quién es Lesmes Sinester?
Un viejo Lasombra muy poderoso, peligroso y cruel. Enemigo de Alexandra de Len, Sire de Iñigo Arista, Lesmes es hermano de Alexandra, enemistado porque esta mato a su Sire común. Tiene fama de cuidadoso y paranoico.

Fue un Nigromante humano convertido en Lasombra por su conocimiento de lo oscuro. Es un Matusalén influyente tirano de la época del mayor auge del Imperio Romano. Va por libre en cuanto al Clan y en su día fue un Señor Lasombra expulsado de su tierra España.


Camino a la Ciudad Oscura
El monje afín al Padre Paliuro les da un mapa con su destino. Está en la frontera entre el Imperio de Luristan y el Califato de Abásida, dos reinos al este de Ultramar a unas tres semanas de Jerusalén.

Los personajes se preparan para viajar y emprenden la aventura.

El único modo de viajar es en caravana. Desiertos, desfiladeros, montañas empedradas, terreno abrupto y peligroso. Se refugian en cuevas y en desierto enterrados. Por el camino ven viejos templos en ruinas y vestigios de antiguas civilizaciones. El lugar de destino está a una semana de cualquier lugar civilizado.
En una colina escarpada llena de rocas, donde nada vivo crece. Se vislumbran en la oscuridad unas construcciones en lo alto de la colina. No se ve una sola luz. No se escucha un solo animal. Solo el ulular del viento y el frio cortante bajo cero del desierto nocturno.

A medio camino del viaje la cuadrilla decide parar en un pueblecito a dejar lo que no necesita y reabastecerse de sangre, provisiones y demás.

Unas noches antes de llegar a su destino, Ales decide dejar su caravana, criados, rebaño y demás recursos ocultos en una cueva para ir solo a caballo con lo mínimo por si hiciera falta el resto a la vuelta.


El Dominio de Lesmes Sinester
Las construcciones de cerca son obras de una serie de casas y templos.
Toda una ciudad en construcción y decenas de personas trabajando en ella.
No hay más luz que la de la luna.
Y de cerca los trabajadores son cuerpos muertos de humanos medio podridos.
El olor es nauseabundo.

Ciudad Oscura


Los muertos no hablan, pero todos ellos trabajan coordinadamente en las diferentes construcciones, andamiajes y agujeros. Carpinteros, canteros, obreros, ebanistas, trabajadores zombis de todo tipo construyen una ciudad en la nada, una Ciudad Oscura.
La escena es muy inquietante y todos los personajes comienzan a sentir como el miedo les cala hasta los huesos…

Los personajes intentan hablar con uno de los trabajadores zombis y sus ojos vacíos les miran sin saber qué hacer, y continúan su trabajo después de unos segundos.

Lesmes Sinester, Matusalén Lasombra

En lo alto del esqueleto de madera de una cúpula de algún tipo de templo, hay una figura oscura con lo que parecen cuernos de macho cabrío…
Las bestias de los personajes se aterrorizan y solo quieren huir del lugar, ese ser les puede matar y eso no gusta a la bestia.

Se acercan y la oscura figura está hablando sola, su voz es grave y rompe el aire gélido que nadie respira:

“Todos vosotros teníais habilidades diversas en vuestra vida pasada. Usadlas. Los carpinteros construirán toda la estructura firme y sólida, los canteros esculpirán la roca y darán a cada habitación el mejor aspecto que es posible para hoy en día. ¿por?(se pregunta a sí mismo como si lo hiciera otro interlocutor) Preguntarlo es una impertinencia, pero soy un Señor generoso. Lo vais a hacer porque yo lo deseo.

Cada rincón del castillo oscuro ha de resultarle atractivo a nuestros invitados. Si claro habrá invitados a lo largo del tiempo. Y vivos no retornados como vosotros. Así que quiero, agua potable, alcantarillado, murallas, pasadizos seguros, todos los lujos modernos posibles.

Todos esos cachorros humanos del mundo fomentan la ignorancia y la ignorancia es el estiércol fértil en el que crecen las cosechas del miedo. Y el miedo es lo que me alimenta. O quizás tengo otras razones más siniestras…

¿Quién sois vos para interrogarme sin piedad sobre asuntos que no os conciernen? ¿Queréis que coja a un par de vosotros para que sirvan de escarmiento?

Todos paran su actividad y se giran hacia su señor, en todas las situaciones y distancias. Baja levitando a un piso más alto de la estructura donde están trabajando varios de estos retornados, e ignorando a sus visitantes, los personajes que observan la escena muertos de miedo.

“Si creo que es hora de daros una lección.”

Se acerca a uno de los zombis que esta martillando la madera.

“Tú, sufre el pánico a ahogarse a pocos centímetros de la superficie”

De pronto el ser muerto se arquea y abre la boca como si estuviera ahogándose, haciendo aspavientos con los brazos.

“Y tú”

Se gira hacia otro obrero que le mira con ojos inexpresivos y blancos.

“Algo más sutil ¿no? ¿Más artístico? La certidumbre de que ella te ha abandonado. De que probablemente ahora mismo está con su nuevo hombre, en sus brazos en su cama, retorciéndose y gimiendo de placer como un animal. Mientras tú sufres en solitario y esperas que vuelva a casa. Mientras te imaginas cada postura posible que puede estar disfrutando con el… cosas que no hizo contigo.

El zombi empieza a gritar mientras se lleva las manos a la cabeza. Se encamina por una tabla cercana al límite de la altura.

“Si claro, tienes miedo, el miedo a la muerte no es el mayor miedo que se puede tener. Ni de cerca”

El zombi se precipita al vacío, y el otro muere ahogado.

“Que esto sea una lección para todos vosotros. Trabajad más. Y preguntad menos.
¿Dónde estáis? Estoy seguro de que hay alguien observándome. Mostraos de una vez o mi ira crecerá por minutos hasta que os mostréis. Mi castigo será aún mayor

Los personajes se muestran ante Lesmes que levita hasta estar enfrente de ellos.

Yrian aterrorizado por verle, no se atreve a acercarse y cae paralizado por el pavor. La cuadrilla lo dejan chupandose el dedo en una cuneta muerto de terror.

“¿os conozco? Oléis a miedo y a sangre nueva. Y por como vestís no parecéis del bando de Alá. ¿Quién os ha dado vela en este entierro?·

Ales Arista le da la carta. Lesmes la lee y la tira.

“¿En serio? ¿Un duelo? ¿Vosotros sois los emisarios? Eso es…Totalmente Maravilloso

Los personajes leen la nota, que en su día Iñigo ya había oteado por encima:

“Te daré la muerte definitiva en combate singular a menos que abandones este mundo antes de que termine la noche.”
Hostibus

Lesmes prosigue:

“Así que Hostibus ¿Qué gran poder ha descubierto con el que quiere matarme?
Una sola bruja… ¿actúa por su cuenta o alguien mueve sus hilos?”

Los personajes no saben las respuestas.

“Entonces será mejor que valláis a aconsejarla. Hacer lo que sea para que cambie de opinión. Está perdida. La última vez hizo falta todo un ejército de hechiceros para encerrarme y aun así tuvieron que recurrir al engaño para hacerlo. Eran incapaces de igualar mi poder.

No pienso marcharme de este mundo. Estoy construyendo un hogar maravilloso aquí. Por fin estoy echando raíces. Todo Gran Poder tiene su propio castillo con idiotas retorcidos y encadenados que le divierten.

Voy a convertir este lugar en mi hogar. Porque yo soy el mayor de los grandes poderes. Esa evidencia es cierta e incontestable. Merezco poseer y transformar este mundo. Este lugar será un paraíso cuando mi sombra se extienda por él. No tengo miedo a nada, yo soy el miedo.

Hostibus, no parece tener miedo, esto disminuye mi poder hacia ella…Aunque hasta la hormiga más poderosa es aplastada por el hombre más débil. ¿Algo más emisarios? Al principio me resultabais entretenidos, pero ahora empezáis a aburrirme. Quizás sea hora de que os marchéis… Decidle a Hostibus que estaré esperándole. Dadle esto.”

Les da una carta negra que se crea de la nada. Con un sello rojo sangre con las iníciales L.S.

“Por cierto, tengo un regalo para el padre Paliuro por hacer el esfuerzo de contactar con las Tinieblas. Es paradójico, un Lasombra que abraza la luz divina… estúpido incurable.”

Abre un portal de oscuridad de la nada y con su mano derecha saca un arcón de madera del tamaño de medio hombre. Es muy pesado y suena a ruido de choque de piedras en su interior.

“Es un detalle para que no olvide de dónde venimos. Sabrá valorarlo. Dádselo en mi nombre y regresad con la respuesta, ahora sois responsables de que me conteste ¿queda claro?”

Solo de ver el cofre y tocarlo un terror incomprensible recorre los fríos cuerpos de los personajes.

Comienzan su regreso a Jerusalén y a una noche se encuentran con todos los soldados, rebaño y caballos muertos y caminando en dirección a la Ciudad Oscura de Lesmer Sinester. Caminan silenciosos y lentamente.

Esto hace que el viaje de vuelta sea especialmente peliagudo sobre todo para el Ventrue y su defecto de solo alimentarse de jóvenes cristianas. Es un viaje tenso y Ales debe ponerse autoritario pero al final llegan a Jersusalén hambrientos como nunca pero vivos. De camino arrasan con todo animal vivo en el mismo poblado que pararon cuando venian.


Nuevo Personaje: Rocaviva, Gárgola



Rocaviva no es su verdadero nombre, fue transformado en contra de su voluntad den gárgola, como todos los de su línea de sangre por los Tremere de los Cárpatos, utilizados como carne de cañón en la Guerra contra los Tzimisce.

Nada se conoce de su pasado, excepto que está cubierto de sangre y rebeldía, pero se sabe que ya no pertenece a los Tremere y que se ha aliado con los Tzimisce para combatir contra sus creadores.

Ahora está en Jerusalén para saldar una deuda que tiene con el Conde Radu de Biztriz, Tzimisce.

Rocaviva debe ayudar a asentarse en Jerusalén a su chiquilla Ekaterine y solo cuando ese asunto este atado y ella integrada en su sociedad vampira, Rocaviva estará en paz con el Conde Radu.

Rocaviva